La lluvia no pudo menguar la asistencia de público al último acto del ciclo Poesía en los Museos celebrado, en el antiguo palacio Ruiz de Castro, actual Museo Hernández Quero, que completó su aforo para recibir a Lola Megías en el retorno a la tierra donde vieron la luz sus primeras creaciones poéticas, en la década de oro del resurgir de la cultura en Motril: los ochenta del pasado siglo.
El acto, organizado por el área de Cultura del ayuntamiento, en el que la autora presentaría sus dos últimas obras, tuvo mucho de viaje en el tiempo para esta motrileña de adopción nacida en Barcelona, pero cuya obra fructificó en un periodo de extraordinaria inquietud literaria y poética en Motril. Fue aquí donde la protagonista de la noche cursó sus estudios de bachillerato uniéndose, al mismo tiempo, al colectivo de poetas motrileños que en aquellos momentos enarboló la bandera de las inquietudes culturales de la ciudad.
Arropada por sus dos presentadores, Jesús Cabezas y Juanjo Cuenca; Lola Megías recibió las palabras de elogio de la alcaldesa de Motril, Luisa María García Chamorro, quien rememoró aquellos años de creatividad juvenil: “fue una época de poesía; Motril era poesía y ese periodo nos dejó a grandes autores que hoy en día nos siguen sorprendiendo con una obra impresionante y madura, fruto del empuje e ilusión del periodo más fértil de la cultura motrileña”, dijo García Chamorro añadiendo que, para la autora, “la poesía fue un auténtico arrebato de inspiración juvenil que la llevó a unirse al Colectivo de Poetas Motrileños en aquel maravilloso momento de nuestra historia reciente. Su incondicional amor por los versos lo transformó todo en su vida, mientas que sus años de bachiller en Motril iban preparándola para un futuro que ni ella misma esperaba”, expresó la primera edil.
De hecho, la producción escrita de Lola Megías pronto comenzó a destacar, al tiempo que comenzó a participar en proyectos radiofónicos tanto en Motril como en Sevilla. De aquella época son sus dos únicos libros de poemas editados en nuestro país y, por cierto, presentados ya en la ciudad.
Lola Megías no imaginaría que su vida tomaría un rumbo imprevisto ya que en el año 2003 se marchó a Estados Unidos con su esposo, adoptando el nombre de Lola Rivera, forjando una increíble trayectoria profesional, pero sin olvidar nunca la tierra que la acogió en su despertar como poeta.
Precisamente, sus dos presentadores y poetas Jesús Cabezas y Juanjo Cuenca no pasaron por alto la extraordinaria vinculación sentimental de Lola Megías con un Motril al que retorna cada vez que es posible y en donde el reencuentro con los familiares y amigos deja escenas como el multitudinario recibimiento del acto celebrado en el Hernández Quero. Ambos poetas, además, destacaron la sensibilidad municipal por la atención y el apoyo que se está prestando al ámbito de la cultura, y agradecieron la participación en el acto poético de la alcaldesa, Luisa María García Chamorro, quien acudió al mismo junto a los miembros de su equipo de gobierno Alejandro Vilar, Jesús Jiménez y Magdalena Banqueri.
Con su voz, sus versos y su nostalgia de la tierra, Lola Megías cautivó a un público entregado en un acto muy emocionante bordado, en lo musical, por la intervención del motrileño Diego Domínguez.