La Policía Local de Motril ha seguido al pie de la letra las instrucciones dictadas por el equipo de Gobierno local del Ayuntamiento para poner freno a cualquier comportamiento que pueda suponer un riesgo de incremento de contagios por coronavirus en la ciudad. El Gobierno local ya advirtió el sábado de que se iban a intensificar las medidas de control y vigilancia para evitar el botellón en la vía pública, controlar los horarios de cierre de las terrazas y el cumplimiento de los aforos en las terrazas y los locales de ocio nocturno, así como el correcto uso de las mascarillas en espacios abiertos y cerrados.
El dispositivo policial habilitado a lo largo del fin de semana ha dado como resultado un total de 19 actas a establecimientos de la ciudad y la imposición de 37 sanciones a ciudadanos por incumplir la obligación de usar mascarilla. Entre los locales para los que se propone una sanción, nueve han sido denunciados por incumplir el horario de cierre, seis por un exceso de ocupación de la vía pública por las terrazas, uno por no contar con la preceptiva licencia de ocupación para la terraza y otro más por realizar un concierto, una actividad que no contaba con permiso ni puede realizarse en el momento sanitario actual.
A todo ello, hay que sumar nueve actas por distintas infracciones a las ordenanzas municipales, entre las que se figuran cuatro sanciones por la realización de ‘botellones’en la vía pública, una práctica prohibida en todo el municipio de Motril desde hace años y cuya prohibición ha sido dictada por el Gobierno regional para toda la Comunidad Autónoma de Andalucía.
Desde el Ejecutivo local motrileño han apelado a la responsabilidad del sector de restauración, hostelería y ocio para el cumplimiento estricto de las normas sanitarias y de seguridad y se han mostrado tajantes al advertir de que, en caso contrario, “no se descartan otro tipo de medidas más contundentes que no gustarán a nadie, porque la única prioridad es la salud de las personas”.
La teniente de alcalde de Seguridad Ciudadana, María Ángeles Escámez, ha advertido de que el dispositivo policial se va a mantener durante los próximos días y de que los agentes van a ser «inflexibles” con el control de este tipo de comportamientos y actitudes que suponen “un riesgo para la salud de todos”. Escámez ha hecho una llamada a la “responsabilidad individual de todos los vecinos y visitantes” para que cumplan las normas sanitarias básicas de uso de mascarillas y distanciamiento social, así como para que “colaboren con los agentes en su labor de velar por la salud de toda la población”.
