La organización FACUA recuerda que los consumidores tienen los mismos derechos en el periodo de rebajas que fuera de ellas, aunque las prendas ya estén en liquidación.
Así el comprador debe recibir una garantía de lo adquirido, una factura o ticket de compra. Los productos deben ser de la misma temporada, sin defectos y se deben poder cambiar o devolver en las mismas condiciones que el resto del año.
Los consumidores también tienen derecho a pagar con tarjeta si se puede hacer normalmente. Los artículos rebajados deben ser, al menos, la mitad de los existentes en la tienda y separar claramente estos de los que son de nueva temporada y no tienen descuentos. En los productos a los que se les haya bajado el precio debe aparecer en la etiqueta el coste original.
Todos los establecimientos están obligados a contar con una hoja de reclamaciones a disposición de los usuarios. Una vez rellenada, el usuario se quedará con dos copias, una de las cuales va dirigida a la Administración.
Si en el plazo de diez días no recibiera respuesta, o ésta no fuera satisfactoria, el usuario se podrá dirigir al Servicio Provincial de Consumo para dar trámite a una denuncia con la copia dirigida a la Administración. También se puede dirigir a una asociación de consumidores como FACUA para que le tramiten su reclamación.
