La alcaldesa de Motril, Luisa María García Chamorro, ha lanzado hoy el mensaje más contundente de todos los expresados durante los dos años transcurridos del actual mandato municipal, al reafirmar “la defensa de nuestras playas como espacio de los motrileños, como bandera turística y como garantía del futuro del municipio”. En el transcurso de la concentración pacífica (en torno a dos centenares de personas, tal y como estaba previsto para garantizar la seguridad de la convocatoria) que ha tenido lugar, este mediodía, junto a la obra del bautizado como “muro de la vergüenza” –que construye la Dirección General de Costas en el extremo oeste del Paseo Marítimo- , la primera autoridad municipal ha puesto voz al malestar colectivo generado en la población “por la actuación unilateral realizada con alevosía por el Gobierno Central, a través del Ministerio de Medio Ambiente y ejecutado por Costas, que no representa más que un certificado de defunción para la playa, históricamente, más popular de la ciudad”.
La convocatoria, realizada al unísono por el Ayuntamiento de Motril y la Asociación de Empresarios de la Costa Tropical, AECOST, ha generado un efecto llamada hacia los principales agentes económicos del municipio, principalmente la hostelería de la fachada litoral “que están viendo como su esfuerzo por la calidad, por apostar por el turismo, se encuentra con una barrera infranqueable que va a limitar la actividad de sus negocios, y ellos no se lo merecen después de lo que ya han pasado en el último año y medio”, aseguraba García Chamorro.
En cualquier caso, la alcaldesa motrileña ha vuelto a poner de manifiesto “la seriedad del gobierno local porque no vamos a dudar en llevar a cabo cualquier acción, para reivindicar nuestra posición de decidir sobre nuestras playas, pero al mismo tiempo tendemos la mano al diálogo y al consenso con Costas, porque tenemos alternativas que deben ser escuchadas”. En este sentido, Luisa María García Chamorro adelantó que esta misma semana ha sido solicitada por los chiringuiteros una reunión, en la Subdelegación del Gobierno en Granada. Pero además, decía la regidora “el Ayuntamiento de Motril tiene con sus deberes hechos, y con las propuestas alternativas para una solución provisional al problema de los accesos y siempre pensando en que, a medio plazo, el Gobierno Central debe realizar una inversión importante en un litoral que lleva cuarenta años olvidado. Esas propuestas deben ser estudiadas, evaluadas y merecemos una respuesta”.
Mientras tanto, la alcaldesa –que ha anunciado que habrá nuevas acciones sin el el plazo de una semana no hay una solución sobre la mesa- apela ya no sólo a que desde Costas se dé un paso atrás, sino al sentido común “porque no podemos permitir que la playa se convierta en una ratonera en caso de una emergencia sanitaria, de las que ya se han producido muchas veces y que, en la actual situación de cierre, puede suponer un riesgo muy serio para la vida de las personas”.
A nivel económico, se ve venir un problema “que ya nos ha dado un anticipo este fin de semana con una caída del cuarenta por ciento de las ventas en los chiringuitos de la Playa de Poniente”, explicaba el presidente de la asociación que los engloba en la Costa Tropical, Francisco Trujillo. En este sentido, expresó su voluntad de ir de la mano tanto del Ayuntamiento como del resto de asociaciones “porque Motril no puede continuar permitiendo que se impida, y más de esta manera, el desarrollo de su playa”.
Desde AECOST, la situación se contempla con mucha preocupación “y al mismo tiempo muy conscientes de que no nos vamos a quedar quietos”, decía su presidente Jerónimo Salcedo quien, desde el primer minuto de la crisis que ha provocado el cierre a los accesos a la playa, ha alineado el posicionamiento empresarial con la defensa enarbolada por el Ayuntamiento de Motril: “nuestra comunicación con el gobierno de la ciudad es permanente y nuestros intereses los mismos, por lo que el apoyo desde el lado empresarial es máximo y teniendo en cuenta que el sector hostelero es ahora mismo el centro de nuestra atención”, decía Salcedo.
La totalidad del gobierno local, encabezado por su alcaldesa, empresarios, vecinos y representantes del tejido social de Motril han refrendado la jornada de protesta, a pie de obra. Un acto que incluso ha tenido el envoltorio emotivo de la música, protagonizada por el grupo motrileño Kasia que ha interpretado el famoso tema “El muro” de Pink Floyd, coreado por no pocos asistentes, tras lo cual la alcaldesa y el presidente de los empresarios se han dirigido al público desde el improvisado escenario móvil de la banda.