Más de 36.900 familias han perdido su casa en 2015, un 3,8 % menos que un año antes, en 18.990 ocasiones tras llegar a un acuerdo con el banco para su entrega, y por desahucio en 17.939 ocasiones.
Según los datos publicados por el Banco de España, cerca del 80 % de las 37.000 viviendas entregadas en 2015, eran el domicilio habitual, un 2,4 % menos que el año anterior, mientras que las 7.600 restantes eran segundas residencias.
En el caso de las familias que perdieron la titularidad de sus primeras viviendas, la mayor parte, unas 15.500, fueron cedidas al banco de forma voluntaria.
Si se tiene en cuenta el número total de viviendas en España con hipotecas, que ascienden a 6,38 millones, los 37.000 inmuebles entregados, representan un 0,57 % del total y el 0,51 % pertenece el domicilio habitual.
Además, otras 13.800 viviendas habituales fueron entregadas por decisión del juez, un 29,8 % más que en 2014, pero cerca de 13.000 propiedades ya estaban vacías mientras que las 800 restantes permanecen ocupadas.