La Policía Nacional ha incorporado a su parque automovilístico de Granada, Motril y Baza un total de 11 nuevas unidades tipo SUV especialmente adaptadas para las labores de patrullaje urbano, estos vehículos, versátiles y polivalentes, han sido modificados por una empresa especializada que les ha dotado de instrumentación específica, modificando además el interior de los mismos para adaptarlos a las necesidades policiales. La entrada en servicio de estos vehículos tendrá lugar de forma inmediata durante el presente mes de octubre.
11 unidades para Granada, Motril y Baza
Dentro del plan de renovación de los medios materiales de que dispone la Policía Nacional se encuentra la sustitución y mejora de los vehículos integrantes del parking automovilístico policial, acorde con la evolución en las tecnologías de seguridad, comunicación y protección del medio ambiente. A nivel nacional se han adquirido más de 300 unidades de nuevos vehículos, fabricados en Francia por una conocida marca europea y pertenecientes al sector de los SUV. Once de estas unidades se incorporarán de forma inmediata al servicio en las localidades de Granada, Motril y Baza.
Los vehículos disponen de un motor de gasolina con cambio automático y un distintivo ambiental tipo “C”. Sin embargo, y teniendo en cuenta que el destino de estas nuevas adquisiciones es el patrullaje urbano, los mismos han tenido que ser modificados y adaptados por una empresa especializada. Entre estas actuaciones figura la separación del habitáculo interno mediante una mampara, destinando la parte trasera para el traslado de detenidos de forma independiente. La tecnología que ya poseen en origen estos vehículos ha sido complementada con la inclusión de sistemas de comunicación e iluminación imprescindibles para la labor policial, eso a su vez ha condicionado la incorporación de una batería auxiliar que dotase de energía a estos elementos sin sobrecargar la incorporada de serie. Por otra parte, el interior del vehiculo ha sido dotado con un extintor de polvo ABC de seis kilogramos, elementos de señalización y control y un botiquín de primeros auxilios, elementos todos ellos que la experiencia en la práctica policial ha demostrado que son de gran utilidad durante las intervenciones llevadas a cabo con vehículos radiopatrullas y que finalmente redundarán en una mejor atención y asistencia al ciudadano.