Un grupo de madres y padres del colegio Garvayo Dinelli, apoyados desde la AMPA ‘La Fabriquilla’, han iniciado este lunes un encierro permanente e indefinido para mostrar su desacuerdo por la supresión de una unidad de primero de Educación Infantil en el colegio.
Las madres y padres se han concentrado a primera hora de la mañana a la entrada del centro con una pancarta en la que se podía leer: “Escuela Pública de calidad sin recortes”.
La Delegación Provincial de Educación ha decidido limitar las plazas de infantil pasando de las actuales 75 a 50 plazas para el curso que viene, cuando las solicitudes presentadas a 31 de marzo suman 68, lo que haría que 18 de estos niños tuvieran que matricularse en otros centros.
Desde la asociación de madres y padres ‘La Fabriquilla’ recuerdan que con esta decisión se está suprimiendo una línea de enseñanza bilingüe en Motril, reclamando el derecho de los padres que viven en esta zona de la ciudad a llevar a sus hijos a este colegio, aunque ante la incertidumbre creada algunos de ellos hayan decidido presentar solicitudes fuera de su ámbito.
La alternativa ofrecida desde la administración no termina de satisfacer a estas madres y padres que quieren mantener su encierro de manera indefinida hasta que se solucione el problema.
A esta protesta se han sumando los concejales andalucistas del equipo de Gobierno, Antonio Escámez y David Martín, quien ha manifestado que la escuela pública de calidad no puede ser solo un eslogan y es algo que hay que aplicar a la realidad, además de abogar por el consenso, el diálogo y escuchar a los ciudadanos.
Por su parte la portavoz municipal de IU, Daniela Paqué, también ha expresado su apoyo a los encerrados al entender que no puede haber recortes en la enseñanza pública y mantener su calidad, a la vez que ha abogado por suprimir los conciertos con la enseñanza privada.
Este encierro ha comenzado a la hora prevista coincidiendo con la entrada de los alumnos al colegio.
Este acto de protesta tendrá un carácter indefinido, según han destacado los propios padres que irán alternándose y haciendo turnos dentro del colegio motrileño para conseguir que su protesta se mantenga firme.
