A pesar de que la actividad del sector hortofrutícola durante los últimos años no ha dejado de crecer y arroja resultados positivos, las condiciones laborales de sus trabajadores y trabajadoras en cuanto a salario, jornadas y derechos están en los niveles del año 2011, cuando se utilizó el argumento de la crisis por parte de las empresas para recortar muchos de los derechos conseguidos hasta el momento.
Una vez superada las excusas de la crisis económica, las empresas se niegan a negociar con la representación de los trabajadores y de las trabajadoras la recuperación de esos derechos.
Delegadas y delegados sindicales de cuatro de las principales empresas del sector hortofrutícola de Motril han informado a una representación de Izquierda Unida de la situación del sector, trasladando sus principales reivindicaciones.
Jornadas que alcanzan las 54 horas semanales, salarios que no llegan a los 7 euros la hora, turnos de 9 horas con veinte minutos de descanso en los que se sabe la hora en la que se entra a trabajar, pero no en la que se sale, control del tiempo que se utiliza para ir al baño. Son, entre otras, algunas de las denuncias que han puesto sobre la mesa la representación de los trabajadores, que considera que los empresarios se han aprovechado de la crisis para endurecer sus condiciones de trabajo y perseguir, únicamente, el incremento del beneficio empresarial por encima de cualquier otra consideración.
Inma Omiste, portavoz adjunta del Grupo Municipal de Izquierda Unida, ha expresado la preocupación de su formación por esta situación que afecta a miles de trabajadores y trabajadoras de un sector de actividad económica que es esencial para Motril y para su Comarca y cuyas empresas son objeto de un trato favorable, tanto por parte del Ayuntamiento como por el resto de administraciones, de modo especial de la Junta de Andalucía.
Nos parece bien que desde las administraciones se procure favorecer la estabilidad y la competitividad de estas empresas, pero también es necesario garantizar que sus trabajadores y trabajadoras desarrollen su labor en unas condiciones laborales adecuadas a las exigencias de su tarea, con un escrupuloso cumplimiento de sus derechos laborales, ha afirmado.
La representación sindical de las empresas del sector han señalado que con estas condiciones laborales y con las trabas y dificultades con las que se encuentran para la obtención de reducciones de jornada es prácticamente imposible la conciliación de la vida laboral y familiar, algo que en un sector altamente feminizado, como es el hortofrutícola, endurece aún más su actividad profesional.
Por su parte, el coordinador de Izquierda Unida Motril, Jose García Llorente, ha trasladado a la representación sindical del sector el firme compromiso de su formación con la defensa de sus derechos y con las reivindicaciones planteadas, criticando además las deficiencias de las empresas en materia de salud laboral y en el cumplimiento del derecho de los trabajadores y trabajadoras a la formación profesional.
Ha asegurando que la asamblea de Izquierda Unida de Motril contribuirá, en la medida de sus posibilidades, a dar visibilidad a la precariedad laboral en la que los trabajadores y trabajadoras desarrollan su tarea y colaborará y trabajará conjuntamente con la representación sindical para el logro de las reivindicaciones planteadas.