El juicio del trabajador despedido en la factoría motrileña de Torraspapel, Francisco Morata, se ha celebrado hoy en el palacio de Justicia de Motril. La defensa del empleado con casi treinta años de servicio ha basado su reclamación en que el despido se debe a la militancia sindical del trabajador y a que fue responsable de Riesgos Laborales.
El juzgado de lo social de Motril ha celebrado la vista hoy del juicio por el despido del trabajador de la factoría de Torraspapel, Francisco Morata, que se ejecutó el verano pasado. Así, la defensa del empleado, ejercida por el letrado Antonio Folgoso, ha basado su reclamación en que la empresa despidió a Morata por ser miembro del Sindicato Independiente Motrileño del Papeleros, el simpa, que está integrado en el Sindicato Andaluz de Trabajadores.
En representación del SAT, el portavoz nacional de la organización, Óscar Reina ha definido a Morata como un trabajador con una hoja de servicios intachable en los casi 30 años que ha formado parte de la plantilla motrileña de Torras