Agentes de la Policía Nacional han evitado el ahogamiento de dos mujeres de 30 y 32 años naturales de Países Bajos que se encontraban haciendo kitesurf en la costa de Motril, las cuales estaban siendo arrastradas por las corrientes mar adentro mientras permanecían enredadas en las cuerdas de sus cometas y exhaustas por el esfuerzo de mantenerse a flote.
Una patrulla de la Comisaría de Motril-Torrenueva Costa se encontraba realizando su servicio en funciones de prevención de la delincuencia, como miembros de un Grupo de Atención al Ciudadano –G.A.C.- cuando, sobre las cinco de la tarde del pasado miércoles día 17, fueron requeridos por un varón que les informó de que dos mujeres se encontraban mar adentro pidiendo auxilio.
Inmediatamente comunicaron el suceso al CIMACC-091 y al resto de servicios de emergencias, ya que las localizaron mar adentro, en la playa Camino del Pelaillo, tras lo cual procuraron no perderlas de vista para ir informando a los servicios asistenciales sobre su ubicación y para ser conscientes de la evolución del incidente.
Inmediatamente, otros policías nacionales, también pertenecientes a la brigada de seguridad ciudadana, que estaban de servicio patrullando las localidades de Motril y Torrenueva Costa, contactaron con la patrulla interesándose si había acudido algún servicio al rescate y su situación respecto a la orilla. La respuesta fue decisiva, las mujeres estaban muy lejos de la orilla, casi no se apreciaban las cometas, y aún no habían recibido ayuda.
Una vez escuchada la respuesta del compañero y ante el evidente peligro que corrían las vidas de las kisurfistas, los agentes decidieron acudir de inmediato al Club Deportivo de Motril donde uno de los componentes tenía atracada su embarcación particular, por entender que era el modo más rápido de llegar hasta las mujeres y poder rescatarlas a tiempo.
Tras observar que aún no se divisaba a ningún otro servicio de emergencias, partieron del puerto al encuentro de la primera de las chicas a la que localizaron a unas dos millas náuticas del puerto y a milla y media de la línea de costa. Durante el rescate, comprobaron que estaba liada entre las cuerdas de la cometa, apoyada en el flotador y agotada por el esfuerzo para mantenerse a flote. Una vez desliada, la subieron a la embarcación. La segunda mujer fue localizada a otra milla náutica mar adentro respecto de la ubicación de la primera y en idéntica situación, siendo igualmente liberada y rescatada.
Ya de regreso a puerto con ambas mujeres, les ofrecieron asistencia médica para asistirlas por presentar síntomas de hipotermia, así como por una herida sangrante en el pie que tenía una de ellas. Si bien, no necesitaron dicha asistencia y únicamente las acompañaron para cambiar sus equipos mojados por ropa seca que guardaban en su vehículo estacionado en las inmediaciones.
