El Pleno del Ayuntamiento de Motril ha aprobado por mayoría la solicitud de descatalogación parcial de terrenos de monte público en La Nacla con el objetivo de que se conviertan en la ubicación del nuevo cementerio de Motril.
Con esta propuesta, se vuelve a solicitar a la Junta la cesión de los terrenos que el PGOU vigente de 2003 señalaba para emplazamiento del nuevo cementerio, con una superficie de 25.000 metros cuadrados. Esta zona formaba parte del monte público de La Nacla bajo la titularidad de la Consejería de Medioambiente de la Junta de Andalucía.
La sesión comenzó con la lectura, por parte de la alcaldesa de Motril, Flor Almón, de un comunicado en repulsa por los actos de violencia de género vividos en nuestro país desde el último pleno. A continuación, la Corporación guardó un minuto de silencio como recuerdo a las víctimas.
El teniente de alcalde de Urbanismo y Medioambiente, Antonio Escámez, ha explicado que con esta propuesta se vuelve a los terrenos iniciales pensados para la ubicación del nuevo cementerio municipal ya que, según ha informado la Junta de Andalucía, “la cesión de otros de mejores condiciones pertenecientes también a La Nacla, es prácticamente imposible debido a la legislación actual”.
“Es realmente difícil cambiar el destino para el que están programados unos terrenos de monte público y para el cual fueron expropiados en su día. La única manera es que haya alterado su calificación urbanística antes del cambio de legislación cosa que solo ocurre con los terrenos delimitados”, ha indicado Escámez.
Así, el PGOU de 2003, aprobado por la Junta de Andalucía, delimitó el terreno de 25.000 metros cuadrados del monte público de La Nacla, y dicho plan, partiendo de esa calificación urbanística, estimó que es posible la desafección de la zona y la cesión al Ayuntamiento de Motril para que esa parcela fuese ocupada por el nuevo cementerio motrileño.
“Lamentablemente, y una vez hechos estudios de viabilidad, estos terrenos no son tan adecuados que los delimitados con posterioridad. Por un lado su situación es más alejada de la ciudad y con mayores pendientes, dificultan y encarecen la ejecución del nuevo cementerio. Por otro lado, ambientalmente las otras opciones son mejores. Se sitúan en terrenos extremos de la zona, cercanos a suelo que ya ha sido utilizado por personas por lo que el impacto es menor”, ha incidido el teniente de alcalde.
Antonio Escámez ha concluido subrayando que la intención es la de, una vez adjudicados esos terrenos, hablar con la Junta, “para poder cambiar la ubicación dentro de las misma finca de La Nacla. Sabemos que es un asunto complicado y que deberemos abordar con la máxima delicadeza posible por lo que, aunque no está garantizado, vamos a trabajar para poder intentar conseguir este objetivo”