El Grupo Municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Motril se ha hecho eco de las quejas de las personas que acuden cada día a la Biblioteca Municipal de la Casa de la Palma, quienes han evidenciado que es muy difícil estudiar en la Sala de Lectura porque las condiciones que presenta no son las idóneas para estudiar o trabajar.
Estas instalaciones, ha comentado Ruiz, “deberían haberse puesto a punto al final del curso académico porque se sabe que todos los veranos es utilizada por muchos estudiantes que o bien no tienen espacio en su casa, o bien encuentran en ellas un lugar cómodo donde pasarse horas estudiando o preparando trabajos en sus ordenadores portátiles”.
“No es normal, por lo tanto, que, a estas alturas del verano, y con el calor que hace en nuestra ciudad, el aire acondicionado esté averiado, no lo arreglen, y soporten en la sala temperaturas de hasta 30 grados los usuarios, y los trabajadores municipales que tienen que pasar allí su jornada laboral”.
“La Sala de Lectura de la Biblioteca es un horno y aparte de arreglar el aire acondicionado, es preciso hacer otras mejoras, como dotar a las mesas de tomas de corriente para los ordenadores portátiles. Son cosas que no requieren de grandes gastos, pero parece que a la alcaldesa y a la concejala de Mantenimiento les gusta gastarse el dinero en chapuzas como los paraguas de la plaza del Ciprés y la calle Seijas Lozano, que han costado más de 35.000 euros y no paran de caerse”, ha lamentado.
“Además, la red de bibliotecas necesita un presupuesto para compra de nuevos volúmenes, y en los dos presupuestos que ha aprobado esta corporación no se contempla cantidad alguna para eso”, ha añadido Ruiz, que ha subrayado que, “por desgracia, este es el Motril de 10 de Luisa García Chamorro, que vende humo a costa del bolsillo de los motrileños mientras su gestión hace aguas en cuanto rascas un poquito”.
Desde el PSOE han reclamado que el Ayuntamiento atienda estas reivindicaciones de los usuarios y usuarias de la Biblioteca Municipal de la Casa de la Palma lo antes posible, “pues a estas alturas de verano van a acabar fundidos, y reclamamos a la alcaldesa menos fastos y alharacas y más preocuparse de las cosas del día a día de nuestros vecinos, que vemos que no están entre sus intereses”.