El Mercado Municipal de Motril vuelve ha vuelto a abrir sus puertas al público, este martes 18, tras el cierre temporal que ha mantenido sin actividad el recinto durante los últimos días; a fin de que se pudiese realizar con total seguridad el mayor grueso de la obra, principalmente la retirada de las cúpulas-lucernarios instaladas en los años 90, y la sustitución de estas por dos modernas y espectaculares estructuras translúcidas que sustentarán un moderno sistema de energía solar y que permitirá que el edificio, inaugurado en 1955 y reformado hace 30 años, sea el primero de sus características en toda España en ser autosuficiente energéticamente.
La alcaldesa de Motril, Luisa María García Chamorro, aseguraba hoy que la obra “sigue su curso en plazo y ya se puede observar perfectamente la transformación que está operando el mercado”. De hecho, las obras van a continuar con la hoja de ruta prevista pero manteniendo abiertas las instalaciones, salvo el cierre efectuado en estos días pasados a consecuencia de la retirada e instalación de las nuevas cubiertas “que por motivos obvios debía hacerse sin nadie en el interior del recinto”. Para la alcaldesa, la ciudadanía ha asistido con expectación a las operaciones de ensamblaje y colocación de las cúpulas, un trabajo que ha necesitado de un buen número de operarios y de maquinaria-grúa de grandes dimensiones que incluso era visible desde toda la ciudad. García Chamorro incide en que el cierre, consensuado con los comerciantes del mercado, “se ha ceñido escrupulosamente a las previsiones y ha permitido que los trabajadores de la obra instalen la totalidad del nuevo sistema de iluminación interior, pre-instalación de aire acondicionado y pintura de techos, entre otras actuaciones que han supuesto un trabajo contrarreloj y verdaderamente ejemplar”, destacaba la primera edil.
“En dos semanas se han hecho muchas cosas y, desde luego, es un hito histórico el haber cumplido los plazos de cierre temporal tan al milímetro”, explica el teniente de alcalde de Obras Públicas, Nicolás Navarro Díaz, quien sostiene que “es un logro ejecutar una obra tan compleja y espectacular manteniendo, al mismo tiempo, la actividad comercial del recinto y solo acudiendo al cierre por lo que ha sido estrictamente necesario y por motivos más que justificados de seguridad”. Navarro ha adelantado, además, que este mismo martes termina el plazo de licitación “de lo que será el remate de la obra que incluye solería, imagen corporativa, decoración, alicatados y jardines verticales”. Además, ya está lista toda la pre-instalación del aire acondicionado. En total, la inversión será de un millón cuatrocientos mil euros de inversión que, para el teniente de alcalde, producirán una transformación total de todo el recinto con la evidente sensación de modernidad, funcionalidad y calidad que ofrecerá el nuevo mercado, ya visible incluso antes de que terminen las obras, algo previsto para el próximo otoño, “pues las galerías y pasillos ya tienen toda la iluminación instalada y operativa, a falta de las lamas de madera, y desde luego la imagen del recinto no va a tener nada que ver con lo que había”, relata Nicolás Navarro. De hecho, mientras concluyen los alicatados y para evitar un impacto visual, aquellas zonas que irán recubiertas de azulejo negro han sido pintadas provisionalmente en este color que sustituye al rosa-tierra anterior y que había quedado completamente desfasado.
Esta intervención en una de las más ambiciosas del actual mandato municipal. Se partió de la premisa de ensalzar la identidad histórica de un edificio singular, totalmente enraizado en la memoria urbana, visual y emocional de los motrileños, por lo que se mantiene su fisonomía exterior, pero interiormente da un salto cualitativo en su mejora funcional, rehabilitación energética, climatización y un vuelco total en la estética de todo el recinto. El teniente de alcalde de Obras Públicas asegura que la obra servirá de “palanca para sacar a licitación la explotación de la segunda planta del mercado, que con este proyecto estamos muy seguros que despertará el interés de la iniciativa hostelera”.
El teniente de alcalde de Urbanismo, Antonio Escámez, ha mostrado su satisfacción por el curso de la obra: “era algo muy necesario y demandado, porque los problemas se sucedían en el interior del mercado y ya era hora de que hiciésemos algo a la altura de la calidad de sus puestos y de lo que merece Motril”. Para Escámez, “se abre un tiempo de oportunidades comerciales en un mercado uniformado, luminoso, elegante y muy cómodo para los motrileños y visitantes”. El esfuerzo económico para el ayuntamiento ha sido importante, según el teniente de alcalde, ya que el consistorio aporta una parte de las obras y los fondos europeos otra.
Y es que, además, la repercusión para la oferta turística de la ciudad será evidente. El teniente de alcalde de Turismo, José Lemos, tiene claro que el mercado “es el corazón y el pulmón de los productos motrileños de calidad, además de ser un elemento vital para la economía de la ciudad por lo que esta obra es fundamental al reactivarlo y ponerlo en valor”. Para Lemos, esta transformación del emblemático mercado “será un atractivo turístico indudable que tenemos que promocionar”.
Además, el efecto llamada para el comercio de la ciudad es una de las consecuencias del ‘nuevo mercado’. La concejala de Comercio, Susana Peña, dio ánimos a quien quiera emprender una actividad comercial en el recinto “porque la segunda planta está disponible y estaremos dispuestos a informar y guiar a quien quiera apostar por este gran espacio que va a tener un buen futuro”, dijo Peña.