El Ayuntamiento de Motril se ha adherido a las protestas de los vecinos de la playa y ha reclamado al Gobierno Central que deje de mover arena y construya de una vez los espigones que acaben con los problemas que generan los temporales. Por segundo día consecutivo, los habitantes de los barrios de Santa Adela y Varadero han cortado el tránsito de camiones que están trasvasando la arena desde las playas del Cable y Poniente a playa Granada. Los tenientes de alcalde Alicia Crespo (Turismo y Playas), Antonio Escámez (Medio Ambiente y Urbanismo) y Susana Feixas (Anejos), han acudido a la concentración convocada por los vecinos, que han comenzado a recoger firmas para trasladar a Costas su malestar por la situación actual y para que el ministerio de Medio Ambiente redacte, ya, el proyecto para la construcción de escolleras.
Crespo, Escámez y Feixas han pedido a Costas, dependiente del ministerio de Medio Ambiente, que no tire más dinero moviendo arena (se estima que cada vez que se hace esto se gasta alrededor de un millón de euros que luego se traga el mar) y acometa el proyecto que presentó “a bombo y platillo” el delegado del Gobierno en Andalucía y la directora general de Sostenibilidad de la Costa y del Mar del ministerio de Medio Ambiente en el mes de junio del año pasado en Granada.
Los tres responsables municipales han pedido al Gobierno de Rajoy que sea sensible a las peticiones “justas” que están haciendo los vecinos y el Ayuntamiento de Motril “para que no se arregle una playa dejando en paupérrimas condiciones a otras” y le han sugerido que mientras se construyen los espigones “prometidos”, hagan aporte de arena desde la cola de la presa de Rules, que ha dicho Antonio Escámez, “acumula toneladas de arena”. También han anunciado que desde el Consistorio se impulsarán “otras medidas de presión hasta que se escuche la voz de todo Motril”.
La responsable de Playas del Ayuntamiento de Motril, Alicia Crespo, ha advertido que cada año se hacen grandes traslados de arena desde la playa del Cable y la playa de Poniente para regenerar playa Granada, lo cual, ha señalado, “genera muchísimo malestar entre los vecinos porque, precisamente, este trasvase de arena perjudica a las playas que están en buenas condiciones y favorece a las playas que están en mal estado”.
“Esta actuación no puede continuar más. Cada año la inversión es mayor, en esta ocasión es de 700.000 euros, para desplazar 200.000 metros cúbicos de arena de una playa a otra que, con toda seguridad, en cuanto llegue el siguiente temporal se perderá”, ha lamentado Crespo, quien ha recordado que desde hace tiempo, el Ayuntamiento motrileño viene demandando una solución “permanente y definitiva para estabilizar nuestras playas”.
“Desde Costas se nos ha venido vendiendo, año tras año, que se iban a tomar las medidas oportunas que nunca se cumplen. De hecho, en junio se vendió con sonoridad que había una estrategia de mejora del litoral de la Costa de Granada y que se iba a poner en marcha en diciembre del año pasado. Se iban a licitar las obras y los proyectos, pero a día de hoy no tenemos noticia de nada”, ha denunciado la teniente de alcalde quien ha advertido que no se puede consentir que se vuelva a realizar un trasvase de arena “que perjudica a los vecinos, a los turistas y a los empresarios de la zona”.
“Durante 45 días la playa va a estar cerrada, cuando en estas fechas no nos podemos permitir eso. Motril tiene un clima magnifico y en estas fechas aún mejor, y lo único que hacemos es espantar al turismo. Vamos a seguir reivindicando que no se venda en prensa tanta mejora de la Costa granadina y que se actué de una vez por todas. Por ello, vamos a comenzar una recogida de firmas para llevar este asunto al ministerio, y si es necesario que nos plantemos allí, así lo haremos”, ha evidenciado Alicia Crespo para concluir.
Por su parte, el responsable de Medio Ambiente y Urbanismo del Ayuntamiento motrileño, Antonio Escámez, ha relatado cómo en una reunión mantenida con responsables del ministerio de Medio Ambiente en Madrid, “éstos nos dijeron que el anteproyecto ya estaba hecho y solo faltaba el proyecto que comenzaría por la salida del río”.
“Pero aquí estamos. Casi un año después y ni siquiera está licitado el estudio. Dijeron que se estaba preparando el proyecto para estas playas y que se comenzaría a la salida del río, terminando en Carchuna-Calahonda, dejando, por otro lado, desprotegidas las playas de estos dos municipios, algo incomprensible”, ha subrayado Escámez quien ha asegurado que si este mismo problema ocurriera en Málaga o Almería “en 4 días ya estaría arreglado”.
“Los 700.000 euros que se están gastando van a acabar en el mar porque apenas que se produzca otro temporal quedarán de nuevo en mal estado”, ha insistido el teniente de alcalde quien ha indicado que estos trasvases de arena están perjudicando no solo a la imagen turística de Motril sino también a la propia playa y sus infraestructuras “ya que, cuando suba la marea, el agua llegará el agua al paseo”.
“Creo que va siendo hora de que este movimiento tome las calles”, ha destacado el teniente de alcalde responsable de Medio Ambiente y Urbanismo, que ha anunciado que las asociaciones vecinales y de empresarios hosteleros ya han estado reunidas “y van a dejar un margen de trabajo que se cumplirá el viernes de la semana que viene, aunque parece ser que Costas no está por la labor”.
“Ese día saldremos a la calle si hace falta y se cortarán todas las zonas que más le duelan al gobierno, porque es la única manera que hay para que escuchen nuestras voces. Todos vamos a exigir a Costas, al Ministerio y al Gobierno de Rajoy, a todos los sitios donde podamos influir, para que de verdad comiencen de una vez estas obras”, ha asegurado Antonio Escámez, quien ha dicho que la solución si hay que aportar arena a las playas no es moverla de un punto a otro de la Costa sino traerla de la cola de la presa de Rules.
“Tenemos una lengua de arena en la zona superior del rio Guadalfeo de millones de metros cúbicos, lógicamente desplazar esta arena sería más caro y más incómodo pero es la mejor solución mientras se hacen los espigones prometidos”, ha aseverado Escámez para terminar.