El Aula de Pensamiento Francisco Javier de Burgos iniciará el próximo sábado su decimocuarta temporada y lo hará en su espacio de encuentros poéticos Refugio de Versos en el Club Náutico de Motril.
Refugio de Versos, un lugar de encuentro con la poesía que viene a emular el refugio que los puertos significan para los navegantes, es el espacio en el que, de manera exclusiva, este veterano colectivo cultural pretende ensalzar y poner en valor la poesía como elemento necesario para el pensamiento y para el desarrollo educativo, personal y colectivo de la sociedad como elemento necesario para el enriquecimiento personal, la convivencia y el debate constructivo.
De esta forma, y bajo la dirección y asesoramiento del poeta y Premio Nacional de Poesía, Antonio Carvajal, pretenden, además, hacer de Motril un destacado faro dentro del círculo nacional de citas literarias en general y de la poesía en particular.
Así, dos grandes y reconocidos autores de este género serán los protagonistas en este primer encuentro de la temporada que comienza. Se trata de los poetas Jesús Munárriz y Francisco Castaño.
Munárriz, que compagina su labor poética con la dirección de la prestigiosa editorial Hiperión, especializada en poesía, nacido en San Sebastián y residente en Madrid, es Licenciado en Filología Germánica por la Universidad Complutense de Madrid, especializando en la Universidad de Jena, en Weimar.
Fue cofundador y director de la editorial Ciencia Nueva desde su fundación hasta su cierre administrativo en 1969, codirector de la colección de poesía Saco roto de la editorial Helios, director de publicaciones de la editorial Siglo XXI de España, y fundador y director actual, de Ediciones Hiperión.
Ha traducido al español, entre otros, a Hölderlin, Rilke, Celan, Aragon, Wilde, Shakespeare y Pessoa.
De su obra poética se destacan, Viajes y estancias, (1975); Cuarentena, (1977); Esos tus ojos, (1981), Otros labios me sueñan, (1992); Corazón independiente, (1998); Peaje para el alba, (1972-2000); Disparatario.
Castaño, salmantino de nacimiento, se licenció en Filología Francesa en su ciudad natal, fue profesor de francés en distintos institutos de Enseñanza Secundaria de Sevilla, Burgos y Madrid hasta su jubilación. Además de trabajar sobre temas de poesía francesa de los siglos XIX y XX, ha
traducido Cartas de la monja portuguesa de Mariana Aldoforado (1988), así como Cristóbal Colón, el visitante del Alba y luego Alabados sean nuestros señores, ambos escritos por Régis Debray.
Más adelante ha seguido traduciendo, del francés a Mallarmé (Hiperión, 2003), Louise Labé y dos piezas de Molière (El avaro; El enfermo imaginario). Aunque también ha traducido del italiano, a Eugenio Montale; o del latín, a Catulo y a Horacio.
Pero, sobre todo, destaca Castaño por su ya abundante obra poética, que es la que define en realidad su trayectoria como literato.
Se inició con la aparición de Breve esplendor de mal distinta lumbre (1985); libro al que siguieron El decorado y la naturaleza (1987); Fragmentos de un discurso enamorado (1990); Siete maneras de mirar a un mirlo (1990); El vuelo de los últimos vencejos (1991); y El libro de las maldades (1992). Destacaron El fauno en cuarentena (1993), que fue premio Jaén de Poesía (donde recoge también poemas fáunicos de los años setenta); así como su excelente Dentro del corazón de la memoria (1997), que es un homenaje al poeta Aníbal Núñez.
Ya en el siglo XXI ha publicado los siguientes poemarios: Primer adiós del fauno (2002); Corazón alfabético (2003); Limericks, animales y canciones (2004); El hallazgo y la espera (2005); Avisos y cautelas (2008).