La alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, junto con el concejal de Mantenimiento del Municipio, Gestión de Infraestructuras y Obras, José Balderas, han visitado las obras que se están ejecutando, a muy buen ritmo, en la motrileña calle de San Miguel y la plaza del Algarrobillo.
Este proyecto de remodelación, cuya ocupación en superficie es de 1.192 metros cuadrados, supone una inversión por parte del área municipal de Gestión de Infraestructuras y Obras de más de 330.000 euros con el objetivo de resolver el deterioro de las redes de abastecimiento y saneamiento de las calles de este barrio, renovando sus redes y, a su vez, reformando su pavimentación. Además de estas vías, se ha incluido dentro del proyecto el tramo sur de la calle San Miguel y la plaza del Almendrillo.
Luisa García Chamorro, como alcaldesa de la ciudad, ha querido destacar la importancia del avance de estas obras en “una zona histórica y muy señera de Motril”, cuya reforma ha sido durante años “muy demandada por los vecinos debido a su estado”. Este proyecto de remodelación urbanística había sido planeado para su ejecución a través de los fondos del Programa de Fomento de Empleo Agrario (PFEA) 2024 aunque “tras el análisis por parte de los técnicos y especialistas y, debido a su complejidad, decidimos incluir la calle San Miguel como un proyecto municipal y realizar su financiación a través de fondos propios”.
“Nos encontramos efectuando una de las obras que más nos complace anunciar como equipo de Gobierno, aquellos proyectos en zonas históricas de Motril que tienen un impacto positivo directo en la vida de los ciudadanos. Estamos muy contentos con la consecución actual del proyecto, que en estos momentos se desarrolla en tiempo y forma según los planes proyectados por los encargados. Es necesario recalcar que se trata de una obra con una dificultad añadida porque supone la remodelación completa de la red de saneamiento, por lo que siempre nos gusta pedir disculpas a todos los vecinos por aquellas molestias que puedan estar ocasionándoles, asegurando un gran resultado una vez estas obras finalicen completamente”, ha enfatizado Luisa García Chamorro.
La consecución de estas obras se enmarca dentro de los objetivos municipales fijados para lograr un modelo urbano sostenible, que incluye actuaciones en el espacio público que favorecen tanto la calidad como el mantenimiento y la mejora de un paisaje urbano dinámico; así como influye en una activación del espacio a diferentes niveles (social, cultural y turístico) con especial atención a emplazamientos degradados o de fragilidad ambiental, social y urbana. Por último, se busca fomentar una movilidad urbana peatonal por la ciudad.
Por su parte, el encargado de Gestión de Infraestructuras y Obras, José Balderas, ha reiterado la idea de la primera edil de “la gran satisfacción del equipo de Gobierno gracias al buen ritmo al que avanzan estas obras”, donde actualmente se ocupa “más del 60% de los trabajos de saneamiento listos”. Una reforma integral que actúa sobre una superficie de “casi 1.200 metros cuadrados y que tiene grandes complicaciones por su complejidad y estrechez, por lo que pedimos a los vecinos un poco de paciencia pues el objetivo es mejorar todo el entorno urbano, desde el pavimento hasta la propia acera, para que los vecinos puedan disfrutar de esta calle en los próximos meses”.